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jueves, 1 de marzo de 2018

Presentación de Justo, de Carlos Bassas

Este viernes 2 de marzo, a las 18.30, Carlos Bassas presentará en Elkar Comedias Justo, su nueva novela.


Por si se pone nervioso, yo estaré a su lado.






No os perdáis la oportunidad de conocer, de primera mano, el proceso de creación de esta novela que viaja con crudeza por una ciudad robada a sus habitantes, que sobreviven entre la nostalgia y la venganza, la violencia y la corrupción. Y siempre, siempre, bajo la particular forma bassiana de entender el lenguaje literario, cada vez más limpio, seco y directo.


Aquí os dejo la sinopsis para que vayáis abriendo boca...




La verdadera justicia debe ser fría, implacable, desapasionada. Y para aplicarla, Dios decidió que cada generación contara con treinta y seis Justos, los tzadik, hombres anónimos que mantienen el equilibrio entre el Bien y el Mal sobre la faz de la Tierra. Justo Ledesma es uno de ellos. Un viejo irascible que discurre por las calles de un barrio, el de Sant Pere, Santa Caterina i la Ribera, que ya no es el suyo; de una ciudad, Barcelona, que dejó de serlo hace tiempo. Un hombre cansado que, consciente de que su fin está cerca, decide saldar cuentas con su pasado; con un pasado que regresa de forma inesperada cincuenta años después.

Escrito en una primera persona de estilo directo y peculiar, Justo esconde un triple relato: el de una vida dedicada a una misión sagrada, el de una venganza y el de la nostalgia por un tiempo cada vez más lejano, por unas calles cada vez más ajenas, por una ciudad moribunda que se desangra víctima de sus propios deseos, de sus propios errores.





martes, 5 de septiembre de 2017

El rastro del lobo, de José Luis Muñoz

Desde hace unos meses ya está en la calle El rastro del lobo, segunda novela de la colección Criminal de Ediciones Traspiés (la primera fue Orán ya no te quiere).


Con la incorporación de José Luis Muñoz, uno de los máximos exponentes de la literatura policiaca ibérica actual, Traspiés enriquece su catálogo con una novela muy negra que nos cuenta la vida de Aribert Heim, médico en el campo de concentración de Mauthausen en tiempos de la segunda guerra mundial, y su persecución durante décadas por parte de autoridades y cazanazis.


A lo largo de la narración Muñoz mezcla ambas épocas con habilidad, proponiendo escenarios  diferentes (Egipto, España, Alemania, América Latina...) y utilizando distintas voces (la del fugitivo, la de quienes lo protegen, la de quienes lo buscan, la de sus víctimas...). Así, no es difícil que las personas aficionadas al tema encuentren elementos que puedan resultarles familiares de películas tan conocidas como Los niños del Brasil, La caja de música u Odessa (basada en la famosa novela de Frederick Forsyth). Las alusiones al Mossad o al Centro Wiesenthal son buena muestra de ello.


De todos modos, y por encima de estos ingredientes tan atractivos, los mayores valores de El rastro del lobo descansan sobre una construcción literaria impecable, en la que brilla, a mi juicio, el lenguaje tan crudo empleado en la descripción de la relación que mantienen el Doctor Muerte y una de sus víctimas. Siguiendo con las influencias cinematográficas, Portero de noche volverá a nuestra memoria al leer (y sufrir) estas escenas.

Así pues, esta es una novela imprescindible para quienes quieran bucear en los entresijos contradictorios del alma humana. Y fundamental para quienes disfrutan persiguiendo nazis.






martes, 13 de septiembre de 2016

Dile a Marie que la quiero, de Jacinto Rey

Vivimos una época en la que nos hemos acostumbrado a ver a diario personas que huyen de las guerras y de la miseria, gente de África o Asia que busca refugio en Europa.

Hace setenta años era el europeo el pueblo que huía de la guerra y el fascismo. Dile a Marie que la quiero es la historia de una familia, en este caso una alemana de origen judío, que intenta escapar de la persecución nazi.

Bregado en la novela negra, Jacinto Rey se aleja del género (aunque asoma en el comportamiento criminal de alguno de sus protagonistas) para relatar esta historia coral, en la que no solo asistiremos a la lucha por la supervivencia de esta familia fugitiva sino que conoceremos a multitud de personajes que les ayudarán, volcados especialmente en la protección de la pequeña Marie.

El autor nos lleva a ritmo de vértigo por los distintos escenarios (Berlín, Provenza, París, Bretaña-Normandía), adereza la trama con escenas de acción y tramas amorosas y, sin profundizar demasiado en los caracteres de los personajes, algo estereotipados, nos ofrece una imagen fiel de la Europa asolada por la Segunda Guerra Mundial.

En resumen, Dile a Marie que la quiero es una novela amena, fácil y rápida de leer, pero que no por ello nos impide reflexionar sobre la vergüenza que vivió Europa hace setenta u ochenta años.

Y, por qué no, sobre la que vive ahora.


sábado, 24 de mayo de 2014

El plan Bérkowitz, de Mario J. Les

Quienes no profundizan demasiado en la realidad de la narrativa navarra (si es que lo hacen), suelen achacarle una cierta monotonía temática, acusándola de demasiado pegada a temas locales, ya sean históricos o políticos.

Ignoran la gran variedad de géneros y escenarios que manejamos, ignoran nuestra capacidad para contar historias intimistas, sí, pero también otras habilidades narrativas que nos pueden llevar al terror, al género policíaco, la ciencia ficción o al thriller.

El plan Bérkowitz es un ejemplo de lo que comento. Su autor, Mario J. Les, nos traslada con audacia desde los escenarios navarros a los parques nacionales africanos, pasando por los atroces campos de concentración de la Segunda Guerra Mundial. Con una premisa tan ambiciosa, Mario construye un thriller que desgrana la historia de una familia navarro-judía, los Bérkowitz, a lo largo de sesenta años.

Con algunos errores propios del novelista novato (de esto sé mucho), Mario demuestra en esta novela-debut que sabe cómo dosificar una trama tan adictiva en capítulos cortos y dotados de ritmo, donde, además, destaca una profunda labor de documentación para construir unos escenarios verosímiles, a caballo entre el National Geographic y el History Channel.

Si a esta consideración unimos la calidad narrativa de muchas de sus escenas, El plan Bérkowitz supone una propuesta más que atractiva para quienes nos sentimos fascinados por los paisajes africanos y las historias de espías y nazis.

Aunque haya quien piense que se trata de un género menor.

PD.- Esta novela, también, puede arrancarte una sonrisa si te gustaba el baloncesto europeo de los años 70 y 80, empleando un truco similar al de Carlos Bassas en El honor es una mortaja.

 

martes, 18 de febrero de 2014

Asesinatos archivados, de Didier Daeninckx

El 17 de octubre de 1961, mientras en Argelia se libraban los combates más violentos de su guerra de independencia, una manifestación de argelinos de París, que protestaban por el toque de queda al que se veían sometidos, acabó en masacre.

Esa misma noche, en el fragor de la represión de los gendarmes, un profesor francés de Historia es asesinado. Veinte años después, su hijo, también.

En este marco histórico, Didier Daeninckx construye Asesinatos archivados (ed. Akal), una novela negra colosal que navega entre el thriller político y la intriga policíaca.

Siempre había pensado que los franceses habían tardado demasiados años (casi cincuenta) en sacudirse los fantasmas que rodean la descolonización de Argelia. Tenemos buenos ejemplos en la actualidad, Hombres, de Laurent Mauvignier, o Donde dejé mi alma, de Jérôme Ferrari.

Pero no, con esta novela me he llevado la sorpresa de que el señor Daeninckx ya lo hizo en 1983.

Con un ritmo perfectamente medido y todos los ingredientes del género (inspector de provincias, intereses gubernamentales ocultos, un poco de amor imposible), Asesinatos archivados nos lleva también al otro gran tabú que pesa sobre la conciencia francesa, la colaboración con los nazis durante la Segunda Guerra Mundial.

Desde luego, esta novela me ha chiflado, no solo porque toque palos de la Historia del siglo XX que siempre me han interesado, sino por la forma con la que el autor supo construir la trama.

Y en menos de 200 páginas, que no hace falta un kilo de papel para armar buenas historias, coño.
 

sábado, 21 de diciembre de 2013

Yasmina Khadra

Bajo este seudónimo femenino, se esconde Mohammed Moulessehoul, el novelista argelino actual en lengua francesa más conocido a este lado del Mediterráneo.

Antiguo militar, su Trilogía de Argel, compuesta por las novelas MorituriDoble blanco y El otoño de las quimeras supuso su debut en el género negro. En dichas obras, Khadra expuso claramente sus opiniones sobre el conflicto que enfrentaba en los años 90 al gobierno argelino del Frente de Liberación Nacional (FLN), progresista y laicista, con el fundamentalismo religioso encarnado por el FIS (Frente Islámico de Salvación). Este hecho, unido a su preferencia por escribir en francés en vez de en árabe, le llevaron a abandonar el ejército e instalarse en Aix-en-Provence.

Pero, sin duda, la novela que le lanzó al estrellato fue Lo que el día debe a la noche, que recreaba el Orán cosmopolita de la época colonial, en la que convivían, no siempre, pieds noirs (de origen francés, español, italiano o maltés) con árabes, bereberes y judíos.

En este 2013 se ha estrenado la versión cinematográfica, de la que os dejo el tráiler:


Los conflictos entre comunidades y la discriminación racial son el marco en el que se desarrolla esta novela que navega entre lo histórico y lo costumbrista, lo romántico y lo social, ambientada en la ciudad que vio nacer a otro novelista argelino francófono, Albert Camus, desde los años 30 hasta la independencia de Argelia en 1962.

Recientemente se ha publicado en español Los ángeles mueren por nuestras heridas, en la que, a través de la supuesta autobiografía de Turambo, un boxeador musulmán, Yasmina Khadra regresa a ese Orán colonial previo a la Segunda Guerra Mundial.



Su forma de narrar, exquisita y cercana al mismo tiempo, constituye la clave de su éxito.

No lo perdáis de vista.

domingo, 12 de mayo de 2013

Novela negra sudafricana (IV)

Nacida en Swazilandia, Malla Nunn vivió su infancia en la Sudáfrica del apartheid clasificada como mestiza, siguiendo las normas de aquel formidable y paranoico aparato burocrático-policial que segregaba a las personas en función de su color de piel.

Afincada en Australia desde la década de los 70, aquellas vivencias infantiles quedan reflejadas en su obra literaria. Así, en Un hermoso lugar para morir, novela ambientada en la Sudáfrica de los años 50 en los que la Ley de Inmoralidad prohibía las relaciones sexuales interraciales, la mezcla (o no mezcla) entre razas es el detonante del asesinato del comisario de policía afrikáner de una pequeña localidad rural fronteriza con el Mozambique colonial portugués.

Emmanuel Cooper, agente de la Policía Judicial, es asignado al caso y, a través de sus investigaciones, conoceremos de primera mano las intrincadas relaciones entre las comunidades bóer, inglesa, zulú e incluso judía del país.

Este policía, veterano desquiciado de la Segunda Guerra Mundial, es todo un descubrimiento (los pasajes en los que se le meten en la cabeza las órdenes y broncas del sargento escocés a cuyas órdenes sirvió en Europa son geniales), y podemos seguir sus andanzas en la segunda entrega de la serie, también editada por Siruela, Que los muertos descansen en paz.

Así pues, nos encontramos ante otro gran ejemplo de la novela negra sudafricana, tan en boga en los últimos tiempos.

Malla Nunn, fotografiada por Jacky Ghossein


 

lunes, 5 de diciembre de 2011

Sanz-Briz

Ayer vi un anuncio en TVE acerca de una película para televisión titulada El ángel de Budapest, próxima a estrenarse, y que será protagonizada por Francis Lorenzo, un actor cuyo talento creo que ha sido desaprovechado por la televisión y el cine español.

La peli está basada en la actuación de Ángel Sanz-Briz, encargado de negocios en la embajada de España en Hungría durante la Segunda Guerra Mundial. Este diplomático contribuyó a la salvación de centenares de judíos húngaros durante la época de la ocupación alemana. No fue el único diplomático europeo empeñado en tal tarea. De Sousa Mendes, Wallanberg, Gruninger u otro español, Santaella, entre otros, obtuvieron el reconocimiento del gobierno de Israel que les concedió el título de Justos entre las Naciones. También forma parte de esta lista el archiconocido industrial alemán Oskar Schindler.

Para salvar a los judíos del Holocausto, Sanz Briz se basó en el Real Decreto del Directorio Militar del general Primo de Rivera de 1924 que otorgaba la nacionalidad española a los judíos que pudieran acreditar su origen sefardí. Este decreto, junto con otro diplomático español, Javier Ruigómez, desempeñan un papel crucial en la trama de Beautiful Rhodesia.

Aquí dejo el trailer de esta película que, desde luego, presenta una excelente factura. El argumento es apasionante.

lunes, 31 de octubre de 2011

Savyon Lodge

Bulawayo es la segunda ciudad más importante de Zimbabwe, tras la capital, Harare. Hasta los años 80, el país contó con una influyente minoría judía, cifrada en torno a las ocho mil personas.

Desde finales del siglo XIX, judíos de Europa central y oriental se habían instalado en la colonia británica de Rhodesia del Sur, construyendo sinagogas y colegios.

Hoy, en Bulawayo, apenas quedan cien, veinte de ellos en la residencia para mayores de Savyon Lodge.

Savyon Lodge, y especialmente uno de sus residentes, desempeña un papel capital en la trama de mi novela Beautiful Rhodesia.

Comedor de la residencia para mayores judíos Savyon Lodge, en Bulawayo