martes, 16 de febrero de 2016

IV Potes y Libros

La Peña Anaitasuna celebra una nueva edición de los encuentros Potes y Libros. En esta ocasión echaremos una mirada a la Historia de Navarra a través de tres novelistas, Juan Torres, Begoña Pro y Mikel Zuza.



De la mano de Juan Torres y su novela Pompelo. El sueño de Abisunhar conoceremos cómo se produjo la llegada de Pompeyo a nuestra tierra y sus contactos con los vascones en el marco de las guerras civiles sertorianas (siglo I a.c.).

Daremos un salto en el tiempo con Begoña Pro y La chanson de los infanzones, saga histórica cuyas dos primeras novelas, El anillo del leal y La dama del velo y el laurel están ambientadas en la época de Sancho el Fuerte (siglos XII-XIII).

Mikel Zuza imaginó un desenlace diferente a la invasión castellana de 1512 y lo noveló en Causa perdida, un homenaje a nuestro pasado y a los libros.

Como veis, tres aproximaciones a tres épocas clave de nuestra Historia.

El 25 de febrero en la Peña Anaitasuna, en San Francisco 14 (Pamplona-Iruñea). A las 8 de la tarde.

Con un pote en la mano.

lunes, 8 de febrero de 2016

La violencia justa, de Andreu Martín

Pocos títulos polisémicos resultan tan atinados como el que nos regala el maestro Andreu Martín en La violencia justa. Porque ese contraste entre los conceptos de proporcionalidad y justicia asociados a algo tan, a priori, repulsivo como la violencia, es, precisamente, el hilo conductor de su última obra.

Esta es una novela negra que trata sobre temas como la violencia machista, la prostitución infantil y la venganza, pero es también una historia de amor y redención. Narrada desde la perspectiva de cada uno de sus dos protagonistas (Teresa es uno de los personajes mejor caracterizados de los últimos tiempos, con un lenguaje propio que la hace única), Andreu eleva la intriga a cada página en otra de sus habituales lecciones de construcción literaria.

Porque sin duda, la mayor virtud de La violencia justa es la forma en la que ha sido escrita. Una forma que invita a que se lea y disfrute de forma pausada, en un nuevo ejemplo de la particular forma del autor de entender la literatura, alejada de las prisas y la lectura rápida, que tan acertadamente comparó con la comida basura en la última edición de Pamplona Negra.

 

miércoles, 3 de febrero de 2016

El mapa (mental) de Orán

Cuando uno se pone a ordenar papeles puede llevarse sorpresas: cartas, postales, facturas (pagadas y sin pagar), propagandas y, a veces, el boceto de una novela.

Como este mapa mental sobre el que empecé a armar Orán ya no te quiere, allá por 2009, nada menos. Me hace gracia reencontrarme con este galimatías de personajes, escenarios y saltos temporales, tramas que ni llegaron a redactarse, escenas escritas que fueron descartadas y otros hilos que sí acabaron plasmados en la novela.

Flechas, notas, garabatos y referencias. Fechas, nombres y lugares.


 
Todo, todo, en un folio.

Me hace gracia, sí, porque ni yo mismo me entiendo.

Ni sé cómo pude apañármelas para que, al final, todo encajara.

 

lunes, 1 de febrero de 2016

Fiat Lux #11

Con un poco de retraso, ya está en la Estafeta el número de invierno de Fiat Lux. Como siempre, nos encontramos ante una revista compleja, sesuda, rigurosa y apasionante, imprescindible en el mundo de los sucesos y el género negro.



Este trimestre, entre otras cosas, tocan reflexiones sobre gastronomía caníbal, un reportaje sobre los kaibiles guatemaltecos, asesinatos de millonarios en la Costa del Sol y de parejas jóvenes en Florencia, fotografías de autores de novela negra por Laura Muñoz, la geografía de Don Winslow, la última entrega del Diario de Max Luminaria/David Llorente, un diálogo entre Bellón y Julián Ibáñez, recomendaciones de libros, pelis y series y... Orán ya no te quiere.



 

miércoles, 13 de enero de 2016

Juegos de cloaca - Estolda jolasak, de Jon Arretxe

Tras la amarga, amarguísima, Sombras de la nada, regresa Touré a nuestras librerías. Y llega traumatizado, como no podía ser de otra forma, tras lo mucho que le hizo sufrir Jon Arretxe entonces.

En Juegos de cloaca el detective privado más africano de Bilbao regresa a su continente pero no a su Burkina Fasso natal, no, sino a Bamako, capital de la vecina Mali. En esta nueva entrega se mantiene el tono duro y amargo de su predecesora, permanecen los viejos personajes bilbaínos de la Pequeña África pero también conoceremos a una galería de malienses, hospitalarios, solidarios y humildes, pese a las corruptelas y miseria que les rodean (corruptelas y miseria que también nos rodean en Europa, por otra parte).

Pese a ese pesimismo predominante, sí que vuelven algunos ramalazos del humor de los primeros Tourés, como los que se observan en el funcionamiento de la oficina de derechos de autor de Mali.

Si andas por Pamplona-Iruñea este jueves 14 de enero, acércate a Elkar Comedias, donde a las 18.30 Carlos Bassas y yo acompañaremos a Jon Arretxe en el bautizo pamplonés de estos Juegos de cloaca (don Alejandro Pedregosa se nos ha caído del cartel).



 

martes, 5 de enero de 2016

Orán ya no te quiere, en Gara

El pasado 28 de diciembre, Gara publicó esta entrevista en la que, como podéis ver, Patxi Irurzun me trata con mucho respeto.



 Foto: Juan de la Cruz

“La historia de alguien que ha vivido tres guerras tenía que ser inevitablemente negra”
Carlos Erice. Escritor

La última novela del escritor de la calle Estafeta, Orán ya no te quiere, mantiene su sello personal, vuelve a ser un thriller político ambientado en el África colonial, en este caso la Argelia bajo dominación francesa, pero esta vez también retrata su propia ciudad, la Iruñea de 2015 o nos lleva hasta los sanfermines de 1936.

Patxi Irurzun. Iruñea

Orán ya no te quiere es la tercera novela de Carlos Erice, tras Beautiful Rhodesia, ganadora del premio López Torrijos en 2011, y de La granja de Perla, que publicó hace solo unos meses. Caprichos del mundo literario. La editorial granadina Traspiés le buscó para inaugurar su colección de novela criminal y él sacó del cajón esta historia de intriga, a caballo entre tres guerras, que nos lleva desde los kebabs de la Iruñea de hoy en día a la Orán colonial con plaza de toros y en la que se comía paella.

Pero usted no ha estado nunca en África…
No, pero soy un poco tramposo, porque me voy a otro continente, a Argelia, sí, pero utilizo la época en que estaba bajo dominio francés. En Orán la mayoría de los habitantes eran de origen europeo y de estos la mayoría españoles, almerienses, alicantinos…Es arriesgado intentar recrear esa época que ya no existe, pero a la vez resulta muy interesante, muy literario, y si además la imaginación del autor ya se las apaña para inventar la peripecia de un chaval de Pamplona, que en los años cuarenta acaba en Orán ,es cuando encajan todas las piezas del puzle de esta historia, en la que una de las protagonistas, Leire, va a visitar a su abuelo a una residencia de ancianos en Pamplona, La Meca, y este, Peio Aranguren le cuenta su historia: como huyó de Pamplona después del golpe de Mola, cómo combatió en la guerra civil, en la segunda guerra mundial y cómo acabó finalmente exiliado en Argelia.

¿Cómo ha sido su método de trabajo para recrear el Orán de esa época?
Por una parte me gusta leer mucha literatura ambientada en los lugares y en los periodos que quiero retratar. En este caso por ejemplo, Albert Camus, que era argelino y allí, en su Orán natal,  ambientó libros como La peste o El extranjero; o a otros como Yasmina Kadra. Y por otra parte, recurrir a las fuentes. Por ejemplo, con mi precario francés envié un mensaje al ayuntamiento de Orán solicitando un plano con las denominaciones de las calles de entonces, que me enviaron y contrasté con las actuales…

Otros pasajes, sin embargo transcurren en Pamplona, y hay quien ha dicho incluso que el libro es una guía de bares de la ciudad.
De bares y de librerías, ¿eh? Sí,  quería describir la Pamplona actual que también hoy se está convirtiendo en una ciudad mestiza, como aquel Orán, y por eso el tercer personaje de la novela es es Mehdi, un argelino que tiene mucho interés en conocer al abuelo de Leire… Pero sobre eso no puedo contar mucho más… Todo ello me sirve para retratar como vemos nosotros a nuestros vecinos, venidos de otros países,  y también cómo ellos nos ven a nosotros…

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miércoles, 23 de diciembre de 2015

Pamplona Negra 2016

Como regalo de Nochebuena, o de víspera (porque de víspera de víspera se conoce el día), ya ha visto la luz el programa para la segunda edición de Pamplona Negra.

Del 19 al 23 de enero, gran ocasión para reunirnos en Baluarte (y alrededores) y hablar de novelas, películas, interrogatorios y otras actividades negras (incluso yo mismo asomaré un poco la nariz al escenario, el viernes 22).

 

martes, 22 de diciembre de 2015

¡Agotada!

Ediciones Traspiés ha anunciado que se ha agotado la primera edición de Oran ya no te quiere.

Se trata de una noticia estupenda, sin duda, pero que no habría sido posible sin el trabajo de la editorial, de la distribuidora, las librerías, el apoyo de periodistas y bloggers y, desde luego, la gran acogida del público.

Y después del jabón para el resto, qué narices, igual hay que pensar que he parido algo realmente bueno.

No te quedes al margen, pues.



 

jueves, 17 de diciembre de 2015

Orán ya no te quiere en El puente lejano

El puente lejano es el blog en el que mi amigo Iñigo Pereyra, prácticamente a diario, critica, comenta y recomienda películas, libros, música, series y cualquier tipo de expresión cultural que le interese.

Por el periodo histórico que toca y los escenarios en los que se desarrolla, yo ya intuía que Orán ya no te quiere le iba a gustar.

Lo que no pensaba es que le fuera a gustar tanto.




Conozco a Carlos Erice desde hace muchísimos años. De la misma quinta, hemos sido compañeros de curso en los largos años de formación en los Jesuitas de Pamplona. Conocía su gusto por la literatura y su currículum literario, por lo que me contaban amigos comunes y tengo que reconocer que éste que hoy reseño, es su primer libro que leo. En su mochila de escritor se pueden encontrar relatos y cuentos, algunos de los cuales han ganado importantes premios y otras dos novelas tituladas, "Beautiful Rhodesia" y "La granja de Perla". Generalmente tiene cierta querencia a tratar temas relacionados con los países africanos, su formación y relación con Europa, sobre todo en el aspecto de sus carreras por sus independencias en el pasado y destructor siglo XX. Todo ello mezclado con un aire fresco y personal de novela negra y suspense. 

Como no podía ser menos, en "Orán ya no me quiere", repite esta temática, aunque imbuyéndose mediante el cruce de historias, en la vida y cotidianidad de nuestra querida Pamplona. La historia nos presenta a tres personajes. Un joven inmigrante argelino, una chica de Pamplona y su abuelo, ahora inquilino de una residencia de ancianos. Si bien el hilo conductor se aprovecha de la joven Leire para dirigir la novela por las diferentes tramas que plantea el escritor,  es el anciano Peio Aranguren, quien representa la quinta esencia de la novela de Carlos Erice. Su deambular por la historia, desde el comienzo de la Guerra Civil española, su paso por Francia antes de embarcarse a Orán, la participación en la 2ª Guerra Mundial y la crisis de Argel, en la que la colonia francesa se ahogará en una terrible guerra civil y provocará el éxodo de los llamados "Pied noir", enmarcan la figura en el pasado y presente, del republicano Peio.
 
 
 

martes, 15 de diciembre de 2015

Así arranca... Orán ya no te quiere

No es cuestión de ir reventando historias, o de hacer spoilers como dice la gente guay, pero igual a alguien le apetece leer las primeras líneas de Orán ya no te quiere. Así que ahí las tenéis.


 


Café con sangre

 

El cuerpo se desplomó sobre la acera y, del orificio surgido en la nuca, la sangre corrió por entre las ranuras que separaban las baldosas.

Mansa y espesa.

Mezclada con la masa encefálica.

Como petróleo vertido en el mar.

Un Renault Dauphine blanco, matriculado en Orán, recogió al autor del disparo que, tras ocultar la Star en el bolsillo interior de su cazadora de cuero y abrir la portezuela, vociferó:

—¡Viva Argelia Francesa! ¡Viva Argelia Francesa! ¡De Gaulle, traidor!

Solo unos minutos antes, con las legañas todavía pegadas a los lagrimales, Rafael González había apurado cotidiano su café con leche, el tazón rebosante de sopas de pan del día anterior, la voz de Charles Aznavour acariciando cada rincón de la cocina de su pisito en rue Jules Verne.

Por delante, una nueva mañana de tranvía atiborrado de indigènes y europeos, de idiomas entremezclados y aromas hediondos, de paradas y más paradas hasta llegar a la gendarmería en avenue Sidi-Chami —una horita de lectura sosegada de los partes del turno de noche, sin novedad, afortunadamente todos sin novedad—, antes de arrancar la habitual y tediosa ronda a pie por las calles del distrito de Delmonte. Al atardecer, un paseo agradable del brazo de Gisèle que se habría puesto tan bonita como siempre y, tal vez, una copita helada de Ricard en la terraza del Café Lyon, frente al Mediterráneo, respirándolo, degustándolo, en charla distraída o silencio relajado, antes de regresar a casa, cenar, escuchar la radio y terminar juntos otra jornada de rutina deliciosa.