El pasado 18 de noviembre Diario de Navarra publicó esta entrevista que me hizo Laura Puy, a propósito de la publicación de Boricuas.
Aquí os la dejo por si pudisteis leerla.
Siempre he querido tener un blog de escritor. Ahora que empiezo a parecerlo, este será el lugar en el que podrás conocer noticias de mi obra, de literatura navarra, de paisajes africanos y otras andanzas.
El pasado 18 de noviembre Diario de Navarra publicó esta entrevista que me hizo Laura Puy, a propósito de la publicación de Boricuas.
Aquí os la dejo por si pudisteis leerla.
En la primavera de 1898, mientras España está a punto de perder su imperio colonial, el consejero espiritual de un colegio de señoritas de San Juan de Puerto Rico, turbado por la confesión de una discípula, comparte su inquietud con un comandante de la Guardia Civil.
Junto con dos periodistas y la viuda de un militante independentista puertorriqueño, el sacerdote y el comandante constituirán un peculiar grupo de investigación que destapará una red de pornografía infantil, al tiempo que la guerra hispano-norteamericana desemboca en el Desastre del 98, del que un joven recluta navarro será testigo directo.
Boricuas combina el género negro con el thriller político e histórico. La trama arranca con el hundimiento de la escuadra del almirante Cervera en la bahía de Santiago de Cuba y la confesión impúdica de una adolescente, que puede influir en las lealtades del pueblo puertorriqueño hacia la Corona española. Además, la novela describe las no siempre fáciles relaciones entre peninsulares y criollos, la vida cotidiana de los guardias civiles y de los soldados de reemplazo destinados en las Antillas españolas así como la puesta en marcha de la Carta Autonómica de 1897.
Por último, Boricuas profundiza en algunos de los pecados más sórdidos de gobiernos y seres humanos que sirven de justificación política para guerras, conspiraciones, luchas de poder y, sobre todo, sacrificio de inocentes.
Con y sin remordimientos.
Publicada por Ediciones Eunate.
Este miércoles 15 de junio, a las 19:00, en la Librería Muga de Paulino Caballero 27, Carlos Bassas y yo acompañaremos a Jokin Azketa en la presentación de su nueva novela La vida en la punta de los dedos.
Jokin vuelve a la montaña, una vez más, para mostrarnos las facetas más oscuras del ser humano.
El Chaltén, en la Patagonia, suele ser un lugar al que acuden alpinistas de todo el mundo. Sin embargo, una siniestra sombra ha caído sobre la zona tras el asesinato de dos niñas que han sido ahorcadas. Hasta allí viaja el escritor Norman Scarf, célebre por sus obras de argumentos turbulentos, con afán investigador y buscando material para su nuevo trabajo. Lo que encuentra en este rincón de Argentina es un montañista estadounidense sospechoso y unas autoridades que quieren cerrar rápidamente el caso para no ahuyentar al turismo. Pero eso va a ser imposible, puesto que una tercera niña acaba de desaparecer.
El próximo 9 de junio, a las 19:30, en la Peña Anaitasuna, calle San Francisco 14, celebraremos una nueva edición de nuestro ciclo Potes y libros.
En esta ocasión, Miguel Izu nos visitará para presentarnos La habitación de Vanderford, una de las mejores novelas del género policiaco-sanferminero que hemos podido leer últimamente. Espías, misterio, guiris sanferminizados, forales sin madres turulatas, ambiente callejero y mitos literarios son los ingredientes de esta historia ambientada en esas fechas que tantas ganas tenemos de volver a vivir.
¡No os la perdáis!
Una nueva cita con Touré, gigoló, vidente, figurante de ópera, kiliki, detective, ladrón y, sobre todo, eterno fugitivo.
Esta vez veremos al de Burkina Faso ganarse la vida en el Madrid más alejado de las postales turísticas, donde se reencontrará con su querida Sa Kené, su vieja amiga de Bilbao.
Además de la pareja principal, unos secundarios bien bosquejados acompañan a los verdaderos protagonistas de la novela: la miseria, el desarraigo y la corrupción.
La presentación tendrá lugar en Elkar Comedias, el 5 de mayo, a las 19:00. Carlos Bassas y yo nos sentaremos a diestra y a siniestra de Jon, como en los viejos tiempos.
A ver a quién ponemos a parir esta vez.
Tortuga cedida por Amaia Flamarique |
Lejos de los thrillers adictivos y las historias trepidantes de más de 500 páginas tan en boga, Alejandro Pedregosa nos ofrece en Siempre es verano una obra tierna, humana y sensible, una novela de iniciación, breve, que nunca pasará de moda.
Alternando la visión del muchacho protagonista con la nostalgia del escritor-narrador-también-protagonista, el autor muestra las dos caras de las localidades turísticas, contraponiendo al turista playero con el nativo de barrio. Pedregosa arma un mundo adolescente plenamente sólido y creíble, con sus amores, desamores, amistades leales, primeras peleas y adicciones, haciendo inevitable que, al leer la novela, retornen a nuestra memoria imágenes de Verano azul, bicicletas inclluidas.
Escrita con mano limpia, concisa y nada almibarada, esta es una novela tierna y sensible, directa al corazón, pero no por ello exenta de humor y sarcasmo, tan propios del estilo (y la personalidad) de Alejandro. Así, durante la lectura de Siempre es verano me han convalidado todo un máster en evaluación de tallas de sujetador y he descubierto unos cuantos sinónimos del acto masturbatorio masculino que desconocía.
Por ello, gracias, una vez más, Pepo: nunca es tarde para aprender.
El próximo 8 de febrero impartiré, dentro de su programa, una clase magistral (¡qué corte me da esa expresión!) donde contaré mi experiencia al respecto.
La cita es en la Biblioteca General de Navarra, a las 18:00, y será también retransmitida vía internet a través del canal de Youtube del Ministerio de Cultura y Deporte.
Cerramos este segundo año de pandemia con premio. Mi cuento El fugitivo del Irati ha resultado ganador del V Certamen de Relatos Tren Irati.
Supone sin duda un premio muy especial, pues conjuga dos de mis pasiones, el relato corto y los trenes antiguos.
Esta tarde viajaré a Liédena, donde recordaremos con placer este viejo tren eléctrico que, al mismo tiempo, hacía las veces de tranvía en Pamplona-Iruñea.
A cotinuación tenéis el enlace al fallo del jurado en las tres categorías del concurso así como los textos ganadores.
http://ayuntamientodeliedena.blogspot.com/2021/12/ganadores-del-quinto-certamen-de-relato.html
Y ya, de paso, aprovecho para desearos lo mejor en este 2022 que va a empezar.
El Irati, en el Paseo Sarasate |
Hace ya unos cuantos meses me lié (o me dejé liar) en un proyecto tan bonito como ambicioso y complejo. De la mano de Frida, Asociación Navarra de Fibromialgia, Síndrome de Fatiga Crónica y Síndrome de Sensibilidad Química Múltiple, un grupo de escritores y escritoras de Navarra nos propusimos conocer a pacientes que sufren estas enfermedades y, de algún modo, darles voz.
De este modo nació El mal invisible. Relatos sobre la fibromialgia, un libro de cuentos acerca de estas enfermades. En este punto conviene señalar, aunque resulte obvio, que este es un libro literario, para nada médico, puesto que nadie de quienes hemos participado en su elaboración lo somos.
Creo, además, que este libro es, sobre todo, humano, muy humano. En mi caso me tocó charlar con Maider Aguirre, quien me contó cómo había vivido el diagnóstico y cómo es su vida cotidiana. Su testimonio inspira mi relato Noticias crónicas, en el que hay cosas que ella me contó y otras que no.
Tengo la suerte de compartir textos en este libro con escritores a quienes quiero un cojón y medio. En sus páginas encontraréis relatos de Tadea Lizarbe, Carlos Bassas, Estela Chocarro, Miguel Izu, Sandra Iraizoz y Susana Rodríguez Lezaun. Ha sido un gustazo trabajar con semejante equipo.
Ahora solo queda que te aproximes a conocer esta realidad a través de un género tan bonito y literario como es el del relato corto.
Tuyo es el reto.
Y el disfrute.
Las novelas de género suelen, o solían, ser denostadas por la crítica.
Bien. Este es un tópico como otro cualquiera, un tópico la mar de desmontable.
Primero, porque ya no existe crítica literaria. A lo sumo, en algunos medios de comunicación, reseñas más o menos agradecidas; y pagadas, por supuesto, pagadas con amistad o con euros contantes y sonantes por la editorial o el grupo editorial de turno.
Y, segundo, porque en el universo internáutico proliferan blogs y webs dedicadados a cada género novelístico. Ahí si que se pueden encontrar recomendaciones acertadas o críticas despellejantes y, en función de la confianza que tengamos en la persona detrás de ese blog o web, nos fiaremos de su criterio prescriptor. Pero eso tampoco es crítica literaria.
Así pues, cualquiera diría que la única forma de medir la calidad de una novela de género se va a basar en las cifras de ventas (quien se las crea) y en la repercusión que cada nuevo título alcance en las redes sociales.
Y luego, ya, si se tiene suficiente poderío para engrasar con euros o dólares la maquinaria, poder ver una adaptación de tu novela en el Netflix o HBO que esté de moda en ese momento.
Y hasta ahí llegó la riada, esa será la máxima trascendencia que tendrá tu libro.
Hasta que un día salta la sorpresa, como en el Bernabeu o Las Gaunas, y te enteras de que tu obra se estudia en la universidad. Y no en la de tu ciudad o en la de la ciudad de al lado, no. Ni siquiera en una de tu país. Ni de tu continente.
Un día te enteras de que dos alumnas del Máster de Literatura y Civilización Hispánica de la Universidad Abou Ber Belkaid de Tlemcen, en Argelia, dedican su Trabajo Fin de Máster a una de tus novelas. Ochenta páginas de análisis de la estructura narrativa, de los personajes, de los tiempos, del lenguaje. Ochenta páginas de estudio y disección de la novela.
Y ya no sabes si quieres una serie de esas de Hollywood, el Planeta, que te entreviste Buenafuente o realmente no necesitas nada más.
Portada del TFM elaborado por Sara Alili y Chaïmâ Brahmi, dirigidas por el Dr. Lofti Berbar |