martes, 9 de octubre de 2018

El rey de Andorra

Este miércoles, día 10 de octubre, a las 19:00 en Katakrak, don Miguel Izu presenta su nueva novela, El rey de Andorra.


Le acompañaremos, con nuestros habituales chistes malos, Carlos Bassas y un servidor.






No os perdáis las peripecias de Boris I, que quiso reinar en los Pirineos en 1934, que se enroló en el ejército alemán en la Segunda Guerra Mundial y que ha acabado siendo sospechoso de un crimen cometido en pleno siglo XXI.






Y, ah, por cierto, es una novela estupenda y sorprendente.



martes, 2 de octubre de 2018

38ª Feria del libro antiguo y de ocasión - Pamplona 2018

Desde hace unos días, la plaza del Castillo acoge la Feria del libro antiguo y de ocasión. Buena oportunidad para encontrar joyas y chollos, en una de las pocas actividades respetuosas con el vecindario que se celebran en nuestro Casco Viejo.


Hasta el 7 de octubre, en horario de 11 a 14 por las mañanas y de 17 a 21 por las tardes.


miércoles, 18 de abril de 2018

La banda de Arruti - Arrutiren banda, de Jon Arretxe

Abril es un mes plagado de presentaciones literarias pero pocas serán tan interesantes (y espero que divertidas) como la que protagoniza Jon Arretxe este jueves, 19 de abril, a las 19 horas, en Elkar Comedias (es fácil de acordarse, el 19 a las 19).


Jon Arretxe ha abandonado temporalmente al consagrado Touré para ofrecernos una historia de gánsters quinquis, robos y zurracapote ambientada en las fiestas de su Basauri. Y, como quien no quiere la cosa, ha conseguido algunas de las páginas más brillantes de su ya larga carrera literaria aunque, como siempre, Jon culpe de ello a la traductora Cristina Fernández Blanco.


Así que ya sabes, este jueves, tienes una cita con La banda de Arruti.







jueves, 1 de marzo de 2018

Presentación de Justo, de Carlos Bassas

Este viernes 2 de marzo, a las 18.30, Carlos Bassas presentará en Elkar Comedias Justo, su nueva novela.


Por si se pone nervioso, yo estaré a su lado.






No os perdáis la oportunidad de conocer, de primera mano, el proceso de creación de esta novela que viaja con crudeza por una ciudad robada a sus habitantes, que sobreviven entre la nostalgia y la venganza, la violencia y la corrupción. Y siempre, siempre, bajo la particular forma bassiana de entender el lenguaje literario, cada vez más limpio, seco y directo.


Aquí os dejo la sinopsis para que vayáis abriendo boca...




La verdadera justicia debe ser fría, implacable, desapasionada. Y para aplicarla, Dios decidió que cada generación contara con treinta y seis Justos, los tzadik, hombres anónimos que mantienen el equilibrio entre el Bien y el Mal sobre la faz de la Tierra. Justo Ledesma es uno de ellos. Un viejo irascible que discurre por las calles de un barrio, el de Sant Pere, Santa Caterina i la Ribera, que ya no es el suyo; de una ciudad, Barcelona, que dejó de serlo hace tiempo. Un hombre cansado que, consciente de que su fin está cerca, decide saldar cuentas con su pasado; con un pasado que regresa de forma inesperada cincuenta años después.

Escrito en una primera persona de estilo directo y peculiar, Justo esconde un triple relato: el de una vida dedicada a una misión sagrada, el de una venganza y el de la nostalgia por un tiempo cada vez más lejano, por unas calles cada vez más ajenas, por una ciudad moribunda que se desangra víctima de sus propios deseos, de sus propios errores.





lunes, 8 de enero de 2018

Pamplona Negra 2018

Ya han pasado las Navidades y desde finales de noviembre conocemos el programa de la cuarta edición de Pamplona Negra, que arranca el próximo 16 de enero.


Demos, pues, la bienvenida a uno de los mejores festivales de género negro que, como siempre, tocará distintos palos, desde la gastronomía hasta el cine, el cómic o la música, pasando, cómo no, por la literatura y, por supuesto, por la sección más popular del festival, El crimen a escena.


Nos vemos en Baluarte del 16 al 20 de enero.



martes, 5 de diciembre de 2017

Comiendo sonrisas a solas, de Tadea Lizarbe

Esta es una novela que en su día causó cierto revuelo mediático en Navarra por su condición de finalista del Premio Planeta de 2014, premio tan denostado como anhelado, la verdad sea dicha, aunque esa sea otra historia y deba ser contada en otra ocasión, que diría Michael Ende.


Pues bien, pese a las dificultades que suelen encontrar para su publicación las novelas finalistas de los certámenes de la familia Lara, Comiendo sonrisas a solas llamó a las puertas (y las abrió) de la potente Ediciones B, lo cual le otorgó unas buenas condiciones de edición, promoción y distribución.


Pero, ¿son esas buenas condiciones garantía de calidad para una novela? De sobra sabemos que no, de sobra conocemos abrumadoras campañas de marketing que han acompañado a libros más bien discretitos.


Sin embargo, Comiendo sonrisas a solas sí que reúne una serie de elementos llamativos.


En esta novela, Tadea Lizarbe presenta una firme declaración (poco importa si unilateral o no) de intenciones literarias: apostar por la originalidad en la siempre difícil coctelería de la mezcla de géneros.


Así, la autora arriesga con audacia y espontaneidad en esta combinación curiosa de intriga, folletín romántico y autoayuda, hasta culminar en su mayor mérito, la construcción del personaje femenino que lleva la voz cantante (o narradora) de buena parte de la historia, un personaje neurótico, desesperante y tierno a partes iguales. Es decir, un personaje igualito-igualito a cualquiera que se acerque a sus páginas, lo que favorece sin duda la empatía del público.


Nos encontramos, pues, ante un debut notable, en el que destacan por encima de otros valores el riesgo, la ambición y el desenfado de la autora, lo que hace que sigamos con atención lo próximo que nos quiera traer.



lunes, 27 de noviembre de 2017

El sueño eterno de Kianda, de Borja Monreal Gainza

No sé qué nos da el final del África colonial portuguesa a los escritores navarros, pero es cierto que es un tema que aparece con cierta periodicidad en nuestra obra. Al guion que preparó en su momento Carlos Bassas para la versión cinematográfica de Un día más con vida y a la novela La granja de Perla, escrita por un servidor, se acaba de unir El sueño eterno de Kianda, flamante ganadora del Premio Benito Pérez Armas.


A través de los ojos negros de Kianda, londinense de Angola, asistimos al relato de la historia de su país, desde el levantamiento de la UPA contra el poder colonial en 1961 y la posterior represión por parte de los portugueses hasta la actualidad, pasando por la independencia de 1975 y la guerra civil que la sucedió.


Alternando épocas, puntos de vista y voces narrativas, Borja Monreal Gainza recorre cincuenta años de lucha y decepción, de discriminación racial y desigualdad social, de derrota y esperanza. Con un lenguaje cuidado y sin alardes, Borja combina las distintas visiones literarias que este conflicto nos ha dejado, desde la de Lobo Antunes hasta la de Pepetela, y las personifica valiéndose de la trayectoria vital de tres guerrilleros, la de sus parejas y la de unos hijos que tratan de comprender.


De este modo, la novela navega con éxito por el desencanto y la revolución, por la sensación de que la marcha de los colonos no supuso el final de la guerra ni de las desigualdades y retrata una sociedad angoleña actual muy capaz de adaptarse a los cambios y a las circunstancias.


En resumen, una gran novela de este joven escritor navarro-canario que resulta, sin duda, imprescindible para quienes sientan interés por el reciente pasado iberoafricano.



11 de noviembre de 1975, el ejército portugués abandona Angola


martes, 5 de septiembre de 2017

El rastro del lobo, de José Luis Muñoz

Desde hace unos meses ya está en la calle El rastro del lobo, segunda novela de la colección Criminal de Ediciones Traspiés (la primera fue Orán ya no te quiere).


Con la incorporación de José Luis Muñoz, uno de los máximos exponentes de la literatura policiaca ibérica actual, Traspiés enriquece su catálogo con una novela muy negra que nos cuenta la vida de Aribert Heim, médico en el campo de concentración de Mauthausen en tiempos de la segunda guerra mundial, y su persecución durante décadas por parte de autoridades y cazanazis.


A lo largo de la narración Muñoz mezcla ambas épocas con habilidad, proponiendo escenarios  diferentes (Egipto, España, Alemania, América Latina...) y utilizando distintas voces (la del fugitivo, la de quienes lo protegen, la de quienes lo buscan, la de sus víctimas...). Así, no es difícil que las personas aficionadas al tema encuentren elementos que puedan resultarles familiares de películas tan conocidas como Los niños del Brasil, La caja de música u Odessa (basada en la famosa novela de Frederick Forsyth). Las alusiones al Mossad o al Centro Wiesenthal son buena muestra de ello.


De todos modos, y por encima de estos ingredientes tan atractivos, los mayores valores de El rastro del lobo descansan sobre una construcción literaria impecable, en la que brilla, a mi juicio, el lenguaje tan crudo empleado en la descripción de la relación que mantienen el Doctor Muerte y una de sus víctimas. Siguiendo con las influencias cinematográficas, Portero de noche volverá a nuestra memoria al leer (y sufrir) estas escenas.

Así pues, esta es una novela imprescindible para quienes quieran bucear en los entresijos contradictorios del alma humana. Y fundamental para quienes disfrutan persiguiendo nazis.






miércoles, 2 de agosto de 2017

El crimen del sistema métrico decimal, de Miguel Izu

Ya lo han dicho otras personas antes que yo, pero El crimen del sistema métrico decimal ofrece unos valores que hacen de esta una novela más que recomendable.

A la recreación meticulosa del Madrid decimonónico, se une el análisis de una serie de factores que provocaron la crisis que afectó a la España de la época: amenazas a la unidad nacional (la hispanocaribeña de entonces, claro), corrupción financiera y política, terrorismos, bancos especuladores, servidores que se servían de lo público... Como podéis ver, nada de esto resulta ajeno al lector o lectora del siglo XXI.

A estos valores ya ensalzados por otras críticas, me gustaría añadir otros como la elaboración de una trama de investigación  reposada (lejos de esas tramas trepidantes que tanto nos estresan en la mayoría de la narrativa policiaca actual), una investigación llevada a ritmo burocrático y funcionarial, ritmo lento pero implacable, en la que el autor no esconde (incluso aprovecha) las influencias de su otra profesión.

Ese estilo sosegado también se traslada a la trama amorosa de la novela, ajena asimismo a esos romances tórridos y salvajes que se suponen imprescindibles en el thriller actual.

Por estos valores, por su originalidad y por su deliberada intención de huir de tópicos manidos en el género, Miguel Izu y El crimen del sistema métrico decimal están cosechando el éxito que se merecen.

Y yo que me alegro.